Es una vibración acústica de altísima frecuencia que excede el límite de la audición humana. Esta banda de frecuencias se utiliza en muchos campos del desarrollo humano : en medicina, en navegación aérea y marítima, entre otros.
El oído humano puede percibir entre los 10 y 20 Khz. Para las personas mayores, la frecuencia superior se deja de percibir y disminuye con los años.
Hacia finales del siglo XIX se comenzó a investigar con un pequeño silbato ultrasónico (la frecuencia de umbral superior de audición del hombre) y también se estudió la frecuencia del umbral superior de algunos animales, pues no había razón para suponer que ésta sería igual que la de los seres humanos.
Las investigaciones tanto de laboratorio como in situ demostraron que las ONDAS ULTRASÓNICAS atacan el sistema nervioso central y auditivo de roedores, palomas, murciélagos, animales y la mayoría de las plagas comunes como muchos insectos, causándoles grandes molestias y la desintegración total de su sistema de vida, no permitiendo que continuen en sus madrigueras o refugios, ni con sus fuentes de alimentación, ni su reproducción, provocando de esta forma el abandono del lugar del grupo completo si éste ya está instalado o bien impide que nuevos animales e insectos hagan del lugar como su territorio, refugio o lugar de alimento o descanso.
La presión sonora que debe soportar la plaga es similar a la que sentiría un ser humano detrás de una turbina de avión. El sistema ultrasónico para combatir a las plagas fue inventado en 1980 por el ingeniero alemán Herbert Genzhofer.
Con el correr de los años, tanto en EE. UU como en los principales países del mundo, estos sistemas han sido perfeccionados, de tal forma que los transductores actuales, incorporando sistemas de variación automática de frecuencia e intensidad, lo que produce que palomas, murciélagos, roedores, los insectos rastreros, y casi todo el resto de las plagas sean seriamente afectadas por dicha presión de sonido.
Por su tipo, los equipos ultrasónicos no interfieren con los diversos equipos eléctricos y electrónicos de uso diario.
El sistema ultrasónico es hoy el único sistema realmente ecológico que combate eficazmente todo tipo de plagas tanto domésticas como industriales, asegurando su completa erradicación y anulando toda posibilidad de nueva instalación o retorno.
Su costo es dramáticamente menor a cualquier tipo de venenos, cebos u otros elementos químicos, ya que no utilizan recargas, controles periódicos de control de plagas y reposiciones, no resultan peligrosos para la salud humana y no contaminan nuestro medio ambiente, por no contener elementos tóxicos con efectos mortales y/o residuales, tanto para las personas como para el medio.
Con su demostrada efectividad, es la mejor solución para erradicar definitivamente las plagas y mantener el lugar protegido y libre de contaminación, contagios, pérdidas y mermas.
Entre otros clientes tenemos al Aeropuerto de Santiago, el más importante y extenso del país, en el control de aves en las pistas de aterrizaje y despegue de los vuelos nacionales e internacionales, más de 30 empresas de Control de Plagas, proveedores de Metro de Santiago y un sinnúmero de grandes, medianas y pequeñas empresas de toda índole, particulares, casas, bodegas, departamentos, galpones, fundos, parcelas, Centros de Distribución, Plantas de producción y elaboración, etc., etc.
